Durante dos meses estuve muerto.
A ratos creía que no, que avanzaba en alguna dirección, que me movía de forma autónoma, pero era una ilusión.
Sólo esperaba.
Durante dos meses no hice otra cosa más que esperar sin moverme de mi ataud.
Esperaba oir esas palabras, que salieran de Tu boca, esperaba que hubiera vuelta atrás y que todo fuera como antes, esperaba que me aportaras un hálito de vida que me permitiera sacudirme todo el polvo que se había acumulado sobre mi alma e iniciar de nuevo la marcha.
Y es ahora cuando las has pronunciado. Ahora que había resucitado después de una lucha eterna que me dejó exhausto.
Justo ahora, cuando ya no estoy seguro de si me importa.
Necesito tiempo para digerir mi amarga victoria, obtenida cuando ya ni siquiera luchaba.
Necesito tiempo.
gensanta, que diría Forges.
ResponderEliminarRecuerda que ninguno de los dos sois muy de fiar ahora mismo. Ninguno tiene la cabeza lo suficientemente fria como para leer otras partes del cuerpo, incluido el corazón.
Hay unos vuelos a Londres tiradísimos de precio. ¿Has probado las pizzas del mercado de Brixton? estupendas. No puedes pasar sin probarlas.
No existen las victorias ni las derrotas en estos casos, yo diría. Tampoco deberían existir ni los rencores ni el olvido, por otro lado.
ResponderEliminarY como la respuesta esta claro que sólo la tienes tú, en este momento, y a lo mejor tampoco… pues si lo que necesitas es tiempo, pídelo, o casi exígelo.
Qué menos.
Digo yo.
Un beso enorme, descansa, que imagino que tienes la cabeza hecha pasta de tapioca ahora mismo :)
Sí, definitivamente necesitas tiempo.
ResponderEliminarTe veo por en Caralibro o en mi Flickr.
Un besito y que vaya todo bien.
Canalla: Ni siquiera se va a volver a hablar de esto como mínimo hasta después del verano.
ResponderEliminarHe dejado meridianamente claro que necesito tiempo y que no sé cuánto, precisamente para evitar no pensar con la cabeza fría.
Para tu tranquilidad ;) .
María: Lo he pedido y se me ha dado. Qué menos, digo yo también.
Inma: El tiempo que necesito no os afecta a vosotros ni a este blog, ni al efecto curativo que ambos ejercéis sobre mí.
Aquí seguiré al pie del cañón (lo que no es óbice para que nos veamos en caralibro y en tu Flickr, que a ver si me abro una cuenta para comentarte!).
Besos y gracias a los tres, guapos!
vale, pasas de pensar. ¿pasas también de la pizza?¿de un mojito en el Mangolandi? veamos, ¿de verdad piensas que fui tan inconsciente como para no reservarme bazas? ¿no te gusta Brixton? bue, tenemos una cuenta pendiente en Liverpool...pese a los scousers.
ResponderEliminarSign on, sign on...
You'll never get a job
Vamos cabrito, que vengas pronto, coñe.
No hombre, de pensar no, sino de tomar una decisión antes de saber que lo que haya decidido es realmente lo que me interesa. Por eso le he pedido tiempo, para organizar mis ideas y digerir las novedades.
ResponderEliminarMe seduce Brixton, la pizza, Liverpool y todo, sólo tenemos que ver cómo lo cuadramos, pero no me lo vas a tener que decir dos veces.
Tiempo. Vale. Pensar, de acuerdo. Nada de decisiones precipitadas, ni de dejarse llevar, que luego el betadine no es infalible... ni el ibuprofeno.
ResponderEliminarYo me iría con canalla, lo tengo claro. (;D)
CMQ: No tengo ni idea de lo que voy a hacer, ahora cualquier camino que no sea el que sigo me parece imposible.
ResponderEliminarProbablemente te haga caso y me vaya con Canalla ;P .