lunes, 24 de agosto de 2009

Testimonios

Hoy me he escapado del trabajo a las dos de la tarde y he gozado del placer indescriptible de comer en mi casa un día entre semana.

Me encanta comer tranquilamente viendo los Simpson y después el Telediario, y así lo he hecho hoy.

Durante el informativo han comentado la noticia de que un grupo de malhechores había secuestrado al hijo de un empresario, lo habían atado y amordazado en una casa de un pueblo perdido de Madrid y habían pedido un millón de euros (así, sin pasarse tres pueblos y dos Comunidades Autónomas ni nada) por su rescate.

Lo que me ha llamado la atención es esa tendencia que tienen algunos medios de buscar el testimonio de los lugareños a toda costa, como si fuera una cuestión de vida o muerte, aunque este tenga el mismo valor informativo que un pedo de Paquirrín.

Ejemplo:

Voz en Off:
...los secuestradores habían abordado el vehículo del joven cuando este se dirigía a su trabajo y lo llevaron a la fuerza a una casa en el término municipal de Pueblo Ignoto Perdido En El Culo Del Mundo.


Viejuno 1:
Pues sí, se conoce que le sacaron del coche y lo trajeron aquí, a Pueblo Ignoto Perdido En El Culo Del Mundo.


(ajá, lo sospechábamos, gracias).


Voz en Off:
El joven fue atado y amordazado, pero al parecer pudo librarse de su mordaza y sus gritos de auxilio fueron escuchados por un vecino de una casa cercana que avisó a la Guardia Civil.


Viejuno 2:
y entonces escuchó unos gritos "auxilio! auxilio! que me han secuestrao!" y ya llamó a la Guardia Civil.


Creo firmemente que si los protagonistas de estos testimonios fueran, directamente, los encargados de narrar la noticia, redundaría en un beneficio para todos, a saber:

Por un lado la cadena de televisión se ahorraría el sueldo del periodista, que esto nunca viene mal.

Por otro lado nos ahorrarían a los espectadores la excitante experiencia de escuchar cada comentario por duplicado.

Como le decían las muñecas de Famosa a Hermida en aquel mítico sketch de Martes y Trece: "No nos lo repitas más, que no somoooos gilipollaaaas".

8 comentarios:

  1. Juaas! Gracias por recordarme el sketch de Martes y Trece, mis ídolos. A mí lo que me intriga sobremanera es por qué todos los comentaristas deportivos tienen el mismo deje extraño en la voz, una cosa así como entre átona y amorfa, no sé si me explico...Sea como fuere, los telediarios ya no son lo que eran: yo juraría que de los 80 a acá se han ido acretinando cosa fina.

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  2. Hola :) llegado aqui a traves del blog de Sirventes, con tu permiso te leo un poquito...

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  3. Reina: Y tanto que te explicas, es de lo más irritante! y esas expresiones rebuscadas tan recurrentes como "el cancerbero albiceleste" o "la escuadra franjirroja"... la madre que les trajo.

    Respecto a la decadencia del informativo como programa, cuando lo más interesante de los Telediarios son los chascarrillos de Matías Prats, es que algo huele a podrido en Dinamarca... pero aún así me gusta ver el Telediario, oye, es una costumbre difícil de cambiar.

    monttse: Hola montsse, estás en tu casa :) .

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  4. Gracias!, me lo he leido en un santiamen!

    Yo que me iba a la cama y me ha enganchao tu historia... muy bonito blog, muy sentido :)

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  5. Gracias, tiene su mérito que te lo hayas leído del tirón (y más aún que comentes a las 3:12 am!) :D .

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  6. Jesusito-por-dios-no-nos-des-el-coñazo-no-nos-lo-repitas-más-que-no-somos-gilipollaaaaaaaaas

    Qué recuerdos, oiga usté.

    Besines!

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  7. Son insufribles, los telediarios. Entre que tenemos una clase política a la que le podría enseñar oratoria un saco de la risa y los reporteros, que le llaman ser periodista a saber que la pe con la a, pa, raro es que los telediarios españoles no los vendan en dvd en otros países bajo la sección de humor.

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  8. pos a mi cada vez que se me cuelga windows me dan ganas de hacer idem con un informático. Cuestión de gremios, supongo.

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